–Desempleo, Covid y aumento de precio en alimentos, entre las causas–
Gastón Monge
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- En los últimos tres años la pobreza extrema en Tamaulipas aumentó de manera considerable del 3 al 3.8 por ciento de acuerdo al reporte más reciente del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval); y de esos pobres cerca de 8 mil se ubican en Nuevo Laredo, según informes de Cáritas en esta ciudad.
El origen de este incremento se debe en parte, de acuerdo a la versión de Elda Elizondo, directora de Cáritas de Nuevo Laredo, un organismo social que depende de la Diócesis, a que la pandemia del Covid dejó sin empleo a muchas personas, a que el salario ya no alcanza para subsanar las necesidades más importantes de una familia, y a que el precio de los productos de la canasta básica son cada vez más caros.
Se trata, de acuerdo a la versión de Elizondo, de personas cuyas necesidades económicas y de alimento aumentaron con la pandemia, por lo que a las 7 mil personas que son atendidas por este programa, se añadieron otras 345 familias a través del programa ‘Covid-19’.
Pero además, dijo que hay otras personas que reciben apoyo de Cáritas, del Banco de Alimentos y de ‘Caridad’ de las diferentes parroquias que hacen trabajo social para cubrir las necesidades de todas las personas que necesitan de este tipo de ayuda.
Aunque el padrón de beneficiarios de Cáritas en la ciudad sigue siendo el mismo, pero cuando se nos vino el Covid aumentó con 345 familias más porque mucha gente se quedó sin trabajo o con un salario reducido, y ya no pudo solventar lo más necesario”, explicó Elizondo.
Por ello es que se sigue apoyando a las personas con el programa ‘Covid-19’, además de otras 120 familias que se vieron afectadas por las tromba de mayo, a las que se apoyó con materiales para construcción, despensas y otros apoyos que paliaran un poco sus necesidades.
“Vemos que hay mucha necesidad, y creo que la pobreza alimentada se ha incrementado, y la gente la está pasando muy difícil, pero aquí estamos tratando de apoyar lo más que podamos porque nuestro compromiso es nuestra preocupación y nuestra ocupación”, señaló.
De las colonias marginadas en las que la pobreza aflora casi a ras de tierra son entre otras, de acuerdo a la experiencia de quienes integran Cáritas, Blanca Navidad, Constitucional, Valles de Anáhuac, San Agustín y otras comunidades ubicadas al poniente y al sur de la ciudad, pero en ellas se refleja más porque en esas colonias la población es más extensa.
“En todas tratamos de atender los casos que nos llegan, y le echamos muchas ganas y siempre con el mismo entusiasmo, y la pobreza aumentó porque mucha gente quedó sin empelo debido a la pandemia, pero se debe también a que la vida es cada vez más cara, y los productos más básicos están cada vez más caros, y ahí vemos que aunque se tenga trabajo el dinero no alcanza”, reiteró.