Cuentas Claras
Javier Claudio
El último reducto de opinión de la ciudadanía, desvanece con “fuerzas vivas”
· – . Incierto panorama vive; más protestas es igual a inconformidad ciudadana
· – . Un socialito a petit comité, así es calificado hoy el Consejo de Instituciones
Por Javier Claudio
Claro que no. – Sin que nos atrape el pesimismo, nada alentador se observa el panorama que dictan los espacios nacionales de noticias, y en el mejor de los casos que sea entonces del lector la mejor evaluación de la serie de protestas que rodean Palacio Nacional, el mega paro de campesinos y transportistas el próximo 24 que, a decir de participantes, paralizará las carreteras en el país, el crimen aun sin resolver del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo y el reciente hallazgo de túneles para huachicoleo en CdMx.
Claro que sí. – Del paro del autotransporte de carga, aquí lo habíamos citado; su disciplina al Gobierno Federal, pasó por varias etapas, que son del aguante, a la “agachonería” y la complicidad, hasta tocar fondo y llegar ahora al rompimiento y el mega bloqueo nacional. Se recuerda cuántas veces subió el precio del diésel, hasta de manera seguida sin que se mostrara reacción alguna y así citamos en una de nuestras columnas recientes que el transportista aguanta, aunque la rama cruja. ¡Pero se quebró!
Clarín. – Hoy la suma otros males, como son los asaltos en carreteras y la injusticia en el campo, prolongan la fila de participantes en esta protesta de ámbito nacional, donde la Asociación Nacional de Transportistas (ANTAC), en alianza con organizaciones campesinas, confirmó que el lunes 24 de noviembre realizarán el mega bloqueo nacional para exigirle al Gobierno Federal atención urgente a la inseguridad, extorsiones y ataques en las rutas que, aseguran suman años sin freno y menos resolver.
Claridades. – Nuevo Laredo reciente la mutilación de voluntades de instituciones y organismos que honesta y justamente dieron contra peso al Gobierno, ciertamente donde el Consejo de Instituciones (CI) se ganó un lugar que hoy es duda ante la ciudadanía y que bien sería el último crisol civil. Entre los hechos que le dieron el respeto destaca su lucha por cobros justos del Gas Natural y que le costó la chamaba a aquél delegado de Profeco Gilberto Barberena Morales por equivocar en su alianza.
Aclarando. – Entonces los cuestionamientos del Consejo de Instituciones tuvieron un valor decidido y honesto en favor de la ciudadanía, vigilantes y coadyuvantes al buen gobierno y caso contrario hasta oponentes y poner “el dedo en llaga”, como así fue en los primeros trabajos –mal hechos—de empresas foráneas para la rehabilitación de los colectores, donde esfumaron millonarias cantidades y hasta huyeron, no sin enfrentar CI el enojo del Gobierno Municipal, pero con la cara alzada.
Clarificando. – Reprocha hoy la ciudadanía la pasividad, el entreguismo y la pose de socialito del Consejo de Instituciones, luego que gestionó y logró la donación de seis hectáreas, requisito del Gobierno Federal para la solicitada y necesaria reubicación del Hospital General de Zona No. 11 del IMSS Nuevo Laredo. Su retardo fue prolongado por parte del Gobierno Federal y se optó por darle otra utilidad a una causa noble del Gobierno Municipal; la Preparatoria Municipal José Vasconcelos.
Claroscuro. – Allá por 2010, el Consejo de Instituciones de Nuevo Laredo le ofreció su apoyo a un grupo de periodistas que recién habían iniciado protestas contra la empresa Nextel (hoy AT&T) por mal servicio y cobros indebidos. De la ciudad de México enviaron varios ejecutivos para “doblar” a como diera lugar las protestas, las que fueron plasmadas en un libro de firmas que aún se guarda. Nextel cedió y colocó más antenas para mejorar el servicio e igual condonó deudas por cobros injustificados.
Sabía usted que. – Si promediamos en 150 millones de pesos aproximado de ingresos anuales al Puente III durante los 25 años de vida, se tendrían una recaudación total por tres mil 750 millones de pesos. Bien sería un informe completo sobre lo que se ha hecho con ese dinero y qué si es que lo hay, dónde está. Aquel Puente III que se hizo con el esfuerzo de Nuevo Laredo, no lo hizo dueño, y lo que es peor debió haberse pagado en la primera década de existencia, sino es que aún se debe una parte.

