–Se suma a las 390 toneladas darias que genera la ciudad–
Gastón Monge
Nuevo Laredo, Tamaulipas.- A las 390 toneladas diarias de basura que se generan en esta ciudad se le agregan cientos de lonas, mantas, carteles y bardas pintadas con publicidad de los diferentes candidatos que participaron en la contienda electoral del dos de junio, basura que aún permanecen en los lugares donde fueron colocados, sin que nadie se haga responsable de su retiro.
A mes y medio de haberse llevado a cabo las elecciones presidenciales del dos de junio, cientos de lonas, mantas, carteles y bardas pintadas con publicidad de los diferentes candidatos que participaron en dicha contienda electoral en esta frontera, aún permanecen en los lugares donde fueron colocados, sin que nadie se haga responsable de su retiro.
En su mayoría se trata de publicidad o propaganda de los candidatos de la coalición PAN-PRI, pero en cantidad le sigue la propaganda política de los candidato de la coalición Morena-Verde-PT, la que continua en los lugares originales en los que fueron colocados, sin que ningún partido político o autoridad se haga responsable de su retiro.

“Hay una buena cantidad de publicidad que está todavía colocada en lugares privados y en las vías públicas, y en bardas”, mencionó el vocal ejecutivo del Instituto Nacional Electoral en esta ciudad, Manuel Moncada Fuentes.
Sin embargo, dijo que para saber quién o quienes deben hacerse responsables de su retiro inmediatamente de haber terminado una jornada electoral, se tiene primero que revisar la normatividad en ese tema.
Pero dijo que la lógica indica quienes colocaron dicha propaganda, y que son militantes y simpatizantes integrantes de alguna organización política en la dinámica del proceso electoral que ya transcurrió, y de la jornada que ya quedó atrás desde hace más de un mes, deberían hacerse cargo de su retiro.
Sin embargo, al no haber sido retirada, dicha propaganda político electoral se convierte en basura que altera y contamina el paisaje urbano de la ciudad, afecta al medio ambiente y puede afectar las redes del drenaje pluvial en esta temporada de lluvias al convertirse en tapones que impidan el libre flujo del líquido, toda vez que son de plástico.
Esta publicidad política ya convertida en basura, de acuerdo a la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU), con sede en la ciudad de México, estima que en esa ciudad la basura cumulada desde las elecciones del dos de junio puede llegar hasta las 25 mil toneladas, el doble de lo que habitualmente se genera en unas campañas electorales.
Lo lamentable de esto es que en Nuevo Laredo no existe organismo, Asociación Civil que se haga responsable de retirar toda esa basura que se acumula entre las 640 toneladas diarias de basura de todo tipo que son generadas por la población.
De ello dijo Moncada que la Ley Federal Electoral y la estatal establecen un plazo mínimo de una semana después de la elección para que los partidos políticos retiren toda la publicidad que permanezca aún en las calles.
“En caso de que no lo hagan le corresponderá al municipio hacerlo a través de los servicios públicos, pero sí hay evidencia de propaganda que todavía permanece, y la conveniencia de que de acuerdo con todas las partes municipales y políticas, estatales, federales y de ecología, se proceda a su retiro”, explicó.